Título Original: Altazor o El Viaje en Paracaídas

No había tenido la oportunidad de conocer la obra de Huidobro hasta ahora, Altazor o El Viaje en Paracaídas es mi primer acercamiento a un poeta latinoamericano excepcional. Por eso debo agradecer profundamente a la editorial por haber agregado al inicio una introducción a modo de ensayo tan prolija que desglosa a la perfección lo que significa esta obra. Con ello nos da a conocer el contexto histórico que envuelve a este poema, las circunstancias que vivió el poeta a lo largo de los doce años que tomó para escribir la obra completa y todo el camino literario que fue transitando hasta llegar a Altazor, su obra cumbre.

Este libro es la obra más excelsa del poeta chileno Vicente Huidobro. Se encuentra dividido en siete cantos, precedido por un prólogo que nos introduce perfectamente a ese concierto de los sentidos que representa todo el poema en sí. En él el autor se presenta como Altazor, un rey que tiene profundos deseos de realizar un viaje tras considerarse inexperto o quizás falto de conocimiento y se podría decir que nace entonces la necesidad de tener una verdadera revelación o epifanía:

Tenía yo un profundo mirar de pichón, de túnel y de automóvil sentimental. Lanzaba suspiros de acróbata.

Una tarde, cogí mi paracaídas y dije: «Entre una estrella y dos golondrinas».

Coger un paracaídas para realizar un viaje (en el que no estarás exento de caídas) habla de la desesperación o de la premura que el rey Altazor tenía por alzar el vuelo. Me encanta esa imagen porque sin duda puede representarnos a cualquiera de nosotros en nuestra eterna búsqueda del qué, del cómo y del cuándo. Este libro está inundado de frases que en lo personal me encantaron, muchas de ellas nos llevan a una reflexión profunda del "Yo": ¿estoy conforme?, qué busco, qué quiero hacer, ¿amo el papel que me toca desempeñar en la vida? y muchas otras preguntas de carácter metafísico.

La vida es un viaje en paracaídas y no lo que tú quieres creer.

Si yo no hiciera al menos una locura por año, me volvería loco.

Y si queriendo alzarte nada has alcanzado, Déjate caer sin parar tu caída sin miedo al fondo de la sombra, Sin miedo al enigma de ti mismo, Acaso encuentres una luz sin noche, Perdida en las grietas de los precipicios.

También se podría decir que Altazor es una crítica y una propuesta al cambio en nuestra sociedad. Huidobro empezando a escribir este poema un año después de la culminación de la Primera Guerra Mundial (1914-1918) en el mismo epicentro de los dolores post bélicos (Europa), se vio empapado por el drama y los cambios drásticos que vinieron a raíz de ese enfrentamiento. Y eso es algo que vemos reflejado en su poema:

Mira a lo lejos viene la cadena de hombres, Saliendo de la usina de ansias iguales, Mordidos por la misma eternidad, Por el mismo huracán de vagabundas fascinaciones, Cada uno trae su palabra informe, Y los pies atados a su estrella propia, Las máquinas avanzan en la noche del diamante fatal, Avanza el desierto con sus olas sin vida, Pasan las montañas pasan los camellos, Como la historia de las guerras antiguas, Allí va la cadena de hombres entre fuegos ilusos, Hacia el párpado tumbal.

Gigantescas ciudades del porvenir, En donde el hombre-hormiga será una cifra, Un número que se mueve y sufre y baila, Y las máquinas mataron el último animal, Ah la hermosa vida que preparan las fábricas, ¿Quién se preocupa de tu planeta?

Vamos cayendo, cayendo de nuestro zenit a nuestro nadir y dejamos el aire manchado de sangre para que se envenenen los que vengan mañana a respirarlo.

Huidobro: transgresor, idealista, pionero del creacionismo, vanguardista. Su poesía es hermosa, profunda, reflexiva y llena de imágenes y vida. Me gusta como jugó con las palabras tan libremente en este poema, es gracioso, delicioso, inspirador. Todo amante de la poesía debería leerlo alguna vez.

Sin embargo te advierto que estamos cosidos a la misma estrella, Estamos cosidos por la misma música tendida, De uno a otro, Por la misma sombra gigante agitada como árbol.

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