Existen personas en todo el mundo que con respecto al tema de los tatuajes no se sienten muy cómodos o para nada conformes. He conocido gente que dice «los tatuajes son una aberración, rompen con la moral y la imagen de las personas», como gente que dice lo contrario «los tatuajes son guay, son cool, son lo máximo». No pienso juzgar a las personas que dicen cosas como lo primero, cada quien es completamente libre de pensar lo que quiera y cada quien tiene una razón para pensar de esa forma. Yo más abiertamente opino que un tatuaje bien realizado es una obra de arte, sea simple o muy complejo, porque es cierto que estar forrados de tatuajes es algo que se sale de lo convencional, de la imagen considerada como «normal» dentro de la sociedad, pero uno que otro tatuaje no está mal, el cuerpo también puede ser un lienzo ¿por qué no?
Yo personalmente tengo uno, es pequeño y no es muy pretencioso pero estoy bastante conforme con él. Pensé mucho en la frase y el diseño en general, pues es algo que se quedará grabado en mi piel por el resto de mi vida y no quiero más adelante arrepentimientos —que bueno que no me lo hice más joven, porque seguro estaría arrepentida hoy.
No discrimino en absoluto a la gente que poseen tatuajes en su cuerpo, no discrimino a las personas por su imagen. Conozco personas que están cubiertos de tatuajes y son las más confiables y sensibles que he podido conocer. Detrás de toda esa imagen de «chicos o chicas fuertes», se esconde una persona diferente, ¿la razón? Experiencias. Claro, no digo que todos sean santos dignos de devoción, los que no llevan ni un tatuaje en el cuerpo tampoco lo son, pero me centraré en mis amistades. Uno de ellos me comenta que es duro tener que lidiar con las críticas, que si bien no se arrepiente de ninguno de sus tatuajes le molesta y le afecta el hecho de ser excluido de algunos grupos sociales por esta absurda razón de llevar tatuajes. Conseguir empleo tampoco es nada sencillo. Si eres ingeniero, doctor, economista, licenciado y miles de etcéteras, no hay empresas «serias» ni clínicas «ejemplares» que acepten a personas tatuadas, de nuevo ¿la razón? Carencia o ausencia de una imagen limpia y confiable. En mi opinión es absurdo! ¿Qué tienen que ver los tatuajes? ¿Si no los tuvieran los contratarían? No entiendo eso!
El otro día miré un reportaje por la tv sobre empresas vanguardistas, una de ellas captó completamente mi atención. Por primera vez escucho la historia de una empresa dispuesta a dar segundas oportunidades y a valorar el talento que el resto del mundo estúpidamente desecha. En esta empresa todos los trabajadores —absolutamente todos— portan orgullosamente sus tatuajes y no se les discrimina por ello. La mayoría son ex convictos que han cumplido con proyectos de reinserción social, con estándares de buena conducta y que han cambiado sus vicios por la oportunidad de una nueva vida mejor que la que llevaban. Esta empresa cree en estas personas que otros rechazan por no estar convencidos del cambio o por «mantener limpia la imagen de la empresa». Sí, es triste y es duro ver como unos se sienten superiores al resto, sólo por tener un título académico, un estatus social y un estilo de vida considerado «excepcional». Yo no puedo ni quiero quedarme callada, soy escritora y como tal hago uso de mis palabras para denunciar cualquier cosa que me parezca incorrecta o injusta. Todos los seres humanos somos iguales: sufrimos, lloramos, reímos, callamos, gritamos, disfrutamos la vida, sentimos dolor físico y emocional. ¿Diferencia racial, de nacionalidad, proveniencia, estatus social? ¿Es que acaso el que no porta un título académico, no posee dinero en el banco, no tiene la piel blanca o rasgos físicos "perfectos" no es digno del aire que respira, del agua que bebe o de los pasos que da? Veámoslo de esta manera, ¡sólo es tinta! Esa persona también envejecerá, también llorará, sufrirá, reirá, y vivirá su vida como mejor sepa.
Es cierto que no es algo natural, no nacimos con tatuajes, muchos pueden alegar que es hasta auto laceración y que no es bueno hacerse daño a sí mismos, pero cada quién tiene el derecho de tomar sus propias decisiones ¿quién somos nosotros para decirles qué hacer?
Bien, ¿qué opinan ustedes sobre este tema de los tatuajes, creen que es algo normal y aceptable o que es un tema tabú? Me gustaría saberlo, déjenme sus comentarios.